El teletrabajo es una modalidad de desempeño de la actividad laboral que se realiza a distancia, es decir, sin tener que estar físicamente en el centro de trabajo, principalmente ayudándose de medios informáticos y valiéndose de las telecomunicaciones.
Hasta ahora, era utilizado solamente de manera parcial, en días o momentos puntuales, o incluso de forma extraordinaria para estar conectado fuera del horario laboral, debido a la sobrecarga de tareas o responsabilidades (el consabido dicho de “llevarse el trabajo a casa”.
En los últimos años, se ha ido implantando tímidamente en las empresas más avanzadas tecnológicamente, y cuya mentalidad en relación a los recursos humanos se ha situado más cerca de la “gestión por confianza” que de la “cultura del presentismo”.
Con la crisis sanitaria que nos ha tocado vivir (y afrontar), la gran mayoría de las empresas se han visto abocadas a implantarlo de manera urgente y forzada, con el fin de poder mantener la actividad. Los que ya se habían adaptado a la modalidad de trabajo en remoto han sufrido mínimos cambios en su día a día, pero para otros ha supuesto una auténtica revolución.
Como dice la canción: “…ya nada volverá a ser como antes…” El teletrabajo ha llegado para quedarse, y supondrá un antes y un después en la gestión de las empresas.
Trabajar en remoto no es simplemente trasladar tus cosas a casa y trabajar desde allí. Aunque a estas alturas, muchos de vosotros ya estaréis más que adaptados a esta forma de trabajar, nunca vienen mal unos consejos para optimizar esta (relativamente) nueva modalidad de trabajo.
Y recuerda, desde el programa de Retorno de Talento a Cartagena, seguimos a tu entera disposición (teletrabajando) para lo que necesites.